El pasado 13 de diciembre la justicia de Entre Ríos falló en favor de una acción de amparo sobre el Ecoparque de nuestra ciudad,  el cual fue apelado por la Municipalidad, aun así continuará trabajando para cumplimentar las medidas necesarias para el que el predio cuente con el certificado de aptitud ambiental y ratifica el plan de acciones  en el relleno sanitario, medidas que no necesitan de un fallo judicial para ser implementadas puesto que están a la vista las políticas ambientales implementadas en nuestra ciudad.

A la luz de la mencionada sentencia el municipio da cuenta de su accionar en la mencionada causa. En junio de 2022, cuatro meses después de haber realizado un pedido de información pública sobre el funcionamiento del Ecoparque, cuya respuesta inmediata hasta el día de hoy aún espera ser retirada, se denunció que Gualeguaychú tenía un basural a cielo abierto y que en cada lluvia contaminaba con sus lixiviados el arroyo El Cura. Generando de forma irresponsable una situación de total desinformación ante los vecinos y vecinas de nuestra ciudad.

El perito especialista Noir, de la UNER, que fue el único en ir al predio a analizar científicamente la situación de los residuos, concluyó que la “infiltración de lixiviado y en el hipotético caso de darse) resultaría insignificante”, destacó también de manera categórica, ante también la hipótesis o conjetura de un “desmoronamiento o ruptura del canal: la posibilidad que este evento suceda es muy baja, lo que se justifica por el ancho que posee el terraplén que brinda una estructura sólida. Pero, si ocasionalmente ocurriera, el lixiviado escurriría hasta el nivel de ruptura del canal. La cantidad de lixiviado que escurriría dependería de la magnitud del daño que se haya suscitado en el terraplén. Aun así, no existiría posibilidad alguna que el líquido llegue hasta el arroyo, debido a la distancia a la que se encuentra”. Vale aclarar que con todo tipo de Incidencias climáticas, desde que el Ecoparque funciona, ninguna de estas hipótesis ocurrió.

El Ecoparque se construyó mediante el aporte económico del BID- a través del Ministerio de Ambiente de la Nación, en su Programa de Municipios Turísticos, cumplimentando con los requerimientos técnicos del mismo, así como con los requerimientos administrativos y herramientas de protección ambiental tales  como el Estudio de Impacto Ambiental y luego el certificado de aptitud ambiental – expedido por la autoridad provincial.

El predio cuenta con su relleno sanitario debidamente construido, una planta de separación de residuos, una cooperativa de trabajadores, con la  política municipal  previa de concientización en la separación de residuos en origen (Programa de Eduación Ambiental) y con una comunidad comprometida en la separación de los mismos

Los basurales a cielo abierto consisten, lisa y llanamente, en el arrendamiento de un inmueble para el depósito -sobre suelo- de residuos sin separación ni ningún cuidado previo ni posterior. Asimismo, y citando nuevamente la fuente oficial del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Social de la Nación “Al no contar con suelo impermeabilizado, los basurales a cielo abierto resultan un foco de contaminación, tanto por la generación de líquido lixiviado como por la emisión de gases de efecto invernadero”. 

Desde hace siete años el gobierno lleva adelante un claro programa que prioriza el cuidado del ambiente y la salud en todas sus políticas, que demuestra con hechos y acciones concretas día a día, por eso acompaña las luchas de nuestro pueblo contra la pasteras, por la eliminación de los agrotóxicos  y por el cuidado del río. Por eso nuevamente invita a trabajar por el bien común sin anteponer intereses políticos electoralistas.