Área de Género y Diversidad Sexual
Semana Mundial de la Lactancia “Impulsemos las lactancias apoyando y educando”
La lactancia materna es un ejemplo de la relación entre la salud humana y la naturaleza. La leche materna se produce sin contaminación y no necesita que se la distribuya.
La leche humana previene la desnutrición, la obesidad y promueve la equidad, ofrece el equilibrio justo entre la necesidad, el sustento y el vínculo
Para poder promover la lactancia materna como un derecho, se debe garantizar condiciones a quienes se encuentran en este proceso. Es por esto que los gobiernos, sistemas de salud, lugares de trabajo y comunidades deben estar informados, educados y empoderados para fortalecer sus capacidades de proporcionar y sostener entornos amigables con la lactancia materna. La familia, sanguínea o elegida, es parte vital del equipo de lactancia materna. Cuando se involucra, repercute de manera positiva en la relación y el desarrollo del bebé. Participar de manera activa en la crianza, tareas domésticas y dar apoyo emocional son pilares fundamentales de apoyo para quien se encuentra amamantando.
Es cierto que el amamantamiento no siempre es fácil para las madres y los bebés. Puede tomar un poco de tiempo y es importante saberlo desde el inicio, para que se asegure de tener todo el apoyo y compromiso necesarios en caso de que se presente un problema. También en la diversidad de cuerpos o por razones de salud, algunas veces el amamantar no es posible y esto no determina una buena o mala maternidad.